El reemplazo valvular transcateter (TAVR) en el tratamiento de pacientes con estenosis aórtica severa y sintomática ha evolucionado sobre la base de la evidencia de ensayos clínicos. Ensayos aleatorios previos de TAVR con válvulas de balón expandible y válvulas autoexpandibles han mostrado que, en pacientes con riesgo intermedio o alto de muerte con cirugía, la TAVR fue superior o no inferior a las terapias estándar, incluida la cirugía de reemplazo valvular aórtico; estos resultados llevaron a una expansión de las recomendaciones de la guía para TAVR. Además, las mejoras tecnológicas y la simplificación de procedimientos han contribuido a un mayor uso de la TAVR, de modo que más pacientes se someten ahora a la TAVR que la cirugía aislada para el reemplazo valvular aórtico en los Estados Unidos. Sin embargo, la mayoría de los pacientes con estenosis aórtica severa tienen un riesgo quirúrgico bajo, y no hay suficientes evidencia sobre la comparación de la TAVR con la cirugía en dichos pacientes.

Compartimos los hallazgos del ensayo de Colocación de Válvulas transcatéteres aórticas (PARTNER) 3, en el que se comparó la TAVR con la cirugía en pacientes de bajo riesgo: Aquí