Válvulas liofilizadas utilizadas en cirugía cardíaca de animales por primera vez
Los trozos de tejido cardíaco se pueden liofilizar y rehidratar para trasplantar, según una investigación en ovejas. La técnica podría permitir que el tejido humano donado se almacene a bajo precio durante años, y permitir a los médicos elegir los trasplantes perfectos «listos para usar», en lugar de tener que usar lo que esté disponible en ese momento.
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el mundo, y alrededor de 250.000 de cirugías de válvulas cardíacas se realizan cada año. Estas implican reparar o reemplazar una o más de las cuatro válvulas que ayudan a bombear sangre a través del corazón. La demanda de estas operaciones está creciendo y se estima que llegará a 800.000 por año para el 2050.
Actualmente, las válvulas cardíacas de reemplazo son mecánicas, donadas de cadáveres o provenientes de cerdos o vacas. En la mayoría de los casos, las nuevas válvulas pueden durar de 10 a 15 años.
Artículo original: New Scientist